¡¡Sexto y último libro 📙 del invierno 🌨, y primero de la primavera 🌸!!

Fuego en la garganta, de Beatriz Serrano (2024)

Ha sido el finalista del Premio Planeta del 2024.

Está dividido en tres partes y un epílogo. Una niña, Blanca, que su vida se rompe, cuando su padre le anuncia que su madre no regresará. Y, su padre, tiempo después, empieza a salir con otra mujer: Rosa, a quién, acaba instalando en casa. A partir de entonces, Blanca empieza a desarrollar un don insólito: la capacidad de obrar milagros, y el primero es desear la muerte de Aurora, una compañera de colegio, que se burla de su situación familiar. El cual, se cumple a los pocos días. 

Con el peso de la culpa sobre sus hombros y las ansiedades propias del abandono, Blanca busca en internet personas con las que hablar y conecta con un grupo de chicas que también se encuentran solas y perdidas, es decir, un chat (de los que habían antes), llamado: XiKaS 666 SaTaNiKaS. Blanca, Inma, Verónica y Carla, se verán unidas por la fascinación que sienten por Charles y Marilyn Manson, Joy Division y su gusto por vestir de negro. Y, Blanca encuentra en ellas, a su familia elegida. Pero hay una de ellas, que no es quién las demás creen que es.

A raíz de esta situación, Blanca empieza a salir de fiesta, tener novio y a drogarse, pero, a la vez, sigue siendo la chica buena, responsable y que aprueba todo. Hasta el día de su 18º cumpleaños, cuando, recibe una nota de su madre desaparecida, felicitándola y asegurándole, que ese extraño “don” que posee, no es nada malo.

La segunda, es el diario personal de la madre de Blanca, en la que revela qué le pasa y por qué se marcha y abandona al marido y a la niña.

Está bien, porque es una historia que recorre la infancia y la adolescencia de Blanca, que de la noche a la mañana, se encuentra abandonada por su madre, y además, no encuentra su lugar en el mundo. Esta novela cuenta una aventura que se traslada de las pantallas a un mundo real en el que habitan padres ausentes, héroes inesperados, monjas, tecnófobos y jipis del sur de España. 

En definitiva, es generacional, fresca y mordaz. No me ha gustado mucho, la verdad, porque no he acabado de entender muchas cosas y no me queda claro qué “don”, exactamente, tiene la protagonista. Sin embargo, me ha hecho pensar en mi madre y en la vida que lleva y la que le hubiera gustado llevar, la cual, sin ninguna duda, sería totalmente diferente a la que le ha tocado vivir. Sobre todo, si no me hubiera tenido, o si yo no tuviera Parálisis Cerebral. 

Lo que más me ha gustado, ha sido que la protagonista escribe en un blog, recordar lo que era entrar en uno de aquellos chats, en los que podías hablar con gente de todo el mundo y que, dos personajes se llamen Felisa, como mi tía, y Jessica, como yo.